La UCR busca superar diferencias
Según detallaron fuentes partidarias a DyN, la convocatoria realizada por el presidente del Comité Nacional, Mario Barletta, para el 13 y 14 de abril es para cerca de 500 intendentes de distintos puntos del país -entre los que figuran ocho jefes comunales de capitales provinciales- y servirá para la renovación de autoridades del cuerpo.
El recambio significará la salida de su titular, el actual intendente de Mendoza, Víctor Fayad, quien a finales del año pasado pretendió reactivar la actividad de la liga de jefes comunales tras un largo período de inactividad pero no generó mayor repercusión.
La reunión tendrá como anfitrión al intendente de Córdoba, Ramón Mestre, uno de los referentes que más relevancia ganó en el partido a partir de su victoria en uno de los distritos clave para el radicalismo, y se dará en un marco de roces internos por asuntos de la agenda política y otros temas partidarios que impactaron en su estructura.
Las elecciones de 2011 significaron la pérdida de unos 100 intendentes en todo el país, pero los municipios siguen siendo una fuente de poder dentro del radicalismo ante la ausencia de gobernaciones, a excepción de Corrientes que es administrada por Ricardo Colombi.
Uno de los recientes problemas propios de la UCR fue la discusión sobre la continuidad del titular de la Auditoría General de la Nación (AGN), Leandro Despouy, en la que se terminó imponiendo el sector liderado por el ex candidato presidencial Ricardo Alfonsín que defendía la permanencia del funcionario.
La disputa dejó como claro perdedor a Barletta, que impulsaba la salida de Despouy, y lo obligó a adoptar un bajo perfil para no seguir confrontando con el alfonsinismo que exhibió su fuerza para respaldar a una figura de su entorno.
La ausencia de Barletta en los homenajes que se realizaron la semana pasada en Chascomús y en el cementerio de la Recoleta a tres años del fallecimiento del ex presidente Raúl Alfonsín fue un importante indicador de la intención del ex intendente de Santa Fe por correrse de la agitación mediática.
En cambio, estuvo en la inauguración de un comité con el nombre del ex presidente en la ciudad sanjuanina de Caucete, en una provincia donde el radicalismo tiene muy poca injerencia y su presencia paso desapercibida para el plano nacional.
Para la reunión que comenzará el viernes próximo fueron invitados tanto los intendentes que responden al alfonsinismo, como los ex cobistas y los que también mantuvieron diálogo en las últimas semanas con dirigentes del PRO, que ya pusieron en marcha su proyecto presidencial para el 2015 y buscan sumar adhesiones.
Los cortocircuitos internos también quedaron al descubierto con la postura en torno al proyecto oficialista del traspaso del subterráneo a la órbita porteña, que el alfonsinismo decidió avalar aún ante la disidencia de un sector del bloque.
Las mismas diferencias tienen lugar en la provincia de Buenos Aires, donde ya fueron convocadas elecciones internas para finales de junio en las que Alfonsín pretenderá imponer al sucesor de su aliado Miguel Bazze frente a las intenciones del grupo de los ex cobistas que quieren ubicar al intendente de Junín, Mario Meoni, en el cargo.