Habló la mujer del carnicero: “Está arrepentido de lo que hizo”
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Compacto Político).
“Está arrepentido”. La que habla es Noemí y lo hace en nombre de su esposo, Daniel Oyarzún, el carnicero que persiguió, atropelló y mató a uno de los dos delincuentes que habían asaltado su local. Frente a la comisaria 3a de Garín donde su marido está detenido, la mujer reclamó por su liberación, informó sobre la marcha que se hará esta tarde en Zárate y hasta le mandó un mensaje a Mauricio Macri: “Que el Presidente me ayude para que salga”.
Justamente hoy, el Presidente dio su opinión sobre el caso del carnicero: "Debería estar con su familia, tranquilo, tratando de reflexionar en todo lo que pasó mientras la Justicia decide por qué paso, por qué sucedió". Poco después de los dichos de Macri, la jueza de Garantías de Zárate-Campana Graciela Cioni resolvió hacer lugar al pedido del fiscal Martín Zocca, de la UFI 6 de Zárate, y ordenó que Oyarzún (37) continúe detenido por el delito de "homicidio simple" de Brian Emanuel González (24).
“Es injusto que esté preso, no tiene antecedentes, no se merece estar en la cárcel”, estimó Noemí, quien tiene dos nenas con el carnicero de 13 y 5 años: “A la más chica le dije que se fue de viaje pero a la más grande no le puedo ocultar las cosas… Emocionalmente están mal, no duermen”.
La mujer del carnicero estimó que la reacción de su marido, de salir a perseguir a los ladrones, se debió a que las otra veces que les robaron perdieron “mucha plata” y “quiso recuperar lo que le sacaron porque no iba a dejar que nos saquen lo poco que tenemos”.
Y agregó: “En la mesa solíamos hablar de cómo actuar ante un asalto y él decía que les daba todo. Les dio todo la primera vez, la segunda también… Esta vez no lo aguantó y creo que fue eso lo que lo llevó a hacer lo que hizo”.
Noemí pudo ver anoche a su marido cinco minutos en la comisaría de Garín donde está detenido. “Está arrepentido”, contó la mujer y reveló que, esta tarde, en Zárate se hará una marcha para pedir por la liberación de Oyarzún.
Unos minutos después del testimonio de Noemí, una camioneta de la Policía estacionó frente a la comisaría y desde allí descendió Oyarzún, esposado. La gente que estaba en el lugar comenzó a pedir Justicia y Noemí, totalmente desencajada, dijo: “Fiscal, dejá de defender a los chorros, defendé a los laburantes”.
Y sostuvo: “Lo bajaron como a un delincuente y él no es un delincuente”. Luego, extendió su pedido para que dejen en libertad a su marido a la gobernadora bonearense, María Eugenia Vidal.
