Cayeron dos nuevos sospechosos por el bestial femicidio de Candela: el video que muestra cómo llevaron su cadáver
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Compacto Político). Candela Magalí Milagros Azoya, oriunda de Mar del Plata, desapareció el 27 de noviembre pasado en Villa Centenario, Lomas de Zamora, donde visitaba a su madre. Había salido rumbo a la plaza de Santa Marta a buscar zapatillas usadas que había comprado por redes sociales. Nada más se supo de ella, hasta el 1° de diciembre último, cuando vecinos denunciaron el hallazgo de restos humanos calcinados junto a las as vías del ferrocarril Roca que une las cabeceras de Temperley y Haedo.
El macabro relato del testigo clave
La pista que llevó a los acusados fue presentada por un testigo cuya identidad se mantiene en secreto. Este hombre aseguró que el 27 de noviembre se dirigió a la casa de Resquín en la calle Terrada para comprar droga. Tras adquirir una bolsa, pidió entrar para consumir, como solía hacerlo. Resquín y otro hombre le negaron el paso. Aseguraron, de acuerdo a este relato, que “su amiga Candela” estaba durmiendo.
Horas después, Resquín y ese otro hombre, hoy prófugo en la causa, le tocaron el timbre a su cliente. Le pidieron “un carrito” para “ir a tirar basura a la vía”. El hombre accedió. Vio como llevaban “una bolsa de lona grande”, según un informe policial del caso, así como un bidón con nafta.
Luego, supo que Carlos Azoya habría sido quien llevó a su prima al domicilio de Resquín.
