Macri anunció que el martes se practicará el primer aborto legal de la Ciudad
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Compacto Político). El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, en una cena organizada por Consenso Republicano, que dirige el ex presidente de La Rural, Guillermo Alchourón, anticipó que el martes próximo se realizará "el primer aborto legal en la ciudad de Buenos Aires. Es una mujer de 32 años en un caso que pasó por todas las instancias legales". Macri no dio más detalles.
Una de las asistentes, Laura Alonso, legisladora del PRO, fue la que defendió la posibilidad de que una chica de 14 años pueda realizarse un aborto sin la autorización de sus padres, tal como lo estableció la Legislatura la semana anterior. "La gran mayoría de los casos a esa edad son violaciones intrafamiliares ejercidas por el padre o el padrastro y muchas veces las madres son cómplices del victimario en esas situaciones siniestras", dijo.
El debate por el veto o la promulgación de Macri del protocolo que aprobó la Legislatura el 28 de septiembre está encendido. En la comida de anoche el jefe de gobierno dijo "soy el jefe del veto", sin pronunciarse específicamente. Ayer en el diario Tiempo Argentino se publicó una solicitada con más de mil firmas pertenecientes a un amplio abanico de partidos políticos, movimientos sociales, referentes de la cultura y del espectáculo, periodistas de renombre y académicos, tanto kirchneristas como de sectores de la oposición al Gobierno nacional, para pedirle que no lo vete.
Entre las firmas figuran las de Víctor Hugo Morales, Jorge Lanata, Ricardo Forster, Beatriz Sarlo, Osvaldo Bayer, Martín Caparrós, los tres senadores por la Ciudad (María Eugenia Estenssoro, Samuel Cabanchick y Daniel Filmus), Cecila Roth, Mercedes Morán, Celeste Cid, Fito Páez, Ernesto Tenembaum, Hebe de Bonafini, Marcelo Zlotowiazda, Sandra Russo, Juan Pablo Feinmann y Florencia Peña. Sectores católicos y evangélicos como el Centro Católico de Bioética y Evangélicos por la Vida, entre otras ONG, le reclamaron lo contrario: que ejerza "la prerrogativa constitucional del veto, esta vez en defensa de la vida de muchas personas".