Se bajó el candidato de Moreno en La Matanza, golpeado por el escándalo Schoklender

Ricardo Bruzzese anunció ayer que declinaba su postulación a intendente de La Matanza, pese a que el kirchnerismo ya lo había habilitado a competir con el Partido de la Victoria y contaba con fuertes apoyos en el gabinete nacional.
Para justificar su sorpresiva decisión, el polémico empresario frigorífico acusado de monopolizar el programa “Carne para Todos”, justificó su decisión en un difuso pedido de la propia Presidenta. “Cristina Kirchner me ha requerido acompañarla. Ello exige dar un paso al costado de mi aspiración personal a la Intendencia de mi amada Matanza priorizando siempre el lugar que demande el Proyecto Nacional", dijo en un comunicado.
"Nuestra conductora, en esta etapa fundamental y maravillosa de consolidación del Proyecto, me ha requerido acompañarla en el Gobierno Nacional. Ello exige dar un paso al costado de mi aspiración personal a la Intendencia de mi amada Matanza priorizando siempre el lugar que demande el Proyecto Nacional", agregó, sin precisar en que consistió el ofrecimiento.
El impacto del caso Schoklender
Lo cierto es que como vino publicando La Política Online, mas allá de la existencia o no del ofrecimiento, el escándalo del caso Schoklender dejó muy mal parado a Bruzzese. Es que su candidatura fue el primer experimento fuerte del plan ideado por el ex apoderado de Las Madres de Plaza de Mayo –con el apoyo de Carlos Zannini- para transformar el poderío económico de esa organización en una estructura política nacional.
Bruzzese fue el emergente de una red de relaciones tejidas entre Schoklender y el secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno, entre otros funcionarios, con eje en La Matanza y particularmente en el Mercado Central.
Sobre esa estructura en la que se mezclaban los negocios regulados por Moreno y los planes de vivienda que manejaba Schoklender, se pretendió convertir a Bruzzese en un rival de peso para el intendente de La Matanza, Fernando Espinosa, uno de los más fuertes aliados del gobernador Daniel Scioli.
Tan evidente era esta alianza que lejos de las sutilezas, los frigoríficos deron Bruzzese se vieron beneficiados con la mayoría de las compras que realiza el Estado para el programa “Carne para Todos” que administra Moreno, como en su momento reveló La Política Online.
Y no sólo eso, luego que la semana pasada la Coalición Cívica una denuncia para que se investigue si en la imprenta de la Fundación Madres de Plaza de Mayo se imprimieron afiches para la campaña en la Ciudad, LPO reveló que los afiches de Bruzzese también fueron impresos por la organización que manejaba Schoklender, hecho que los propios allegados del empresario confirmaron.
Según la denuncia presentada por Patricia Bullrich, los afiches en cuestión se habrían pagado a través de cheques de la Fundación de las Madres, “o sea con fondos públicos”.